Iluminación industrial y comercial 

Subcategorias

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  Campanas industriales LED

  Las campanas LED, también conocidas en inglés como highbay LED, son luminarias diseñadas específicamente para iluminar grandes espacios interiores como almacenes, fábricas y gimnasios. Estas luces LED son eficientes en energía y rentables en comparación con las lámparas de descarga de alta intensidad (HID) tradicionales.

  Las campanas LED vienen en diferentes formas y tamaños, pero todas comparten las mismas características. Están hechas de materiales duraderos como el aluminio, lo que las hace resistentes a la corrosión, el óxido y el daño del ambiente. Tienen una alta salida de lúmenes, lo que significa que pueden producir mucha luz mientras consumen menos energía. También tienen una vida útil más larga que las lámparas HID, lo que significa que necesitan menos mantenimiento y reemplazo.

  Uno de los beneficios de usar campanas LED es que pueden ayudar a ahorrar costos de energía. Consumen menos electricidad que las luminarias tradicionales, lo que puede resultar en ahorros significativos en las facturas de servicios públicos mensuales. También producen menos calor, lo que significa que no ponen una tensión adicional en los sistemas de aire acondicionado.

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  Luminarias LED ATEX

  La iluminación ATEX incluye varios tipos de luminarias diseñadas para ser utilizada en entornos donde existe riesgo de explosión. Este tipo de luces se utilizan típicamente en industrias como la del petróleo y la gasolina, el procesamiento químico y la minería.

  La iluminación ATEX cuenta con sistemas de aislamiento que le permiten contener cualquier explosión que pueda ocurrir dentro del accesorio, evitando que se propague a otras áreas del entorno. Sus materiales resultan altamente duraderos y son resistentes a condiciones ambientales adversas, como temperaturas extremas y materiales corrosivos.

  Las luminarias LED ATEX combinan la alta seguridad con un consumo de energía más bajo, que les permite ofrecer una enorme luminosidad sin que se dispare el gasto económico; y se trata de un complemento fundamental para cumplir las normas de seguridad en cualquier sector industrial con atmósferas explosivas.

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  Proyectores industriales LED

  Los proyectores industriales son dispositivos de iluminación de alta potencia diseñados para uso exterior en entornos industriales. Estos proyectores suelen utilizarse para iluminar grandes áreas, como sitios de construcción, fábricas y almacenes. Están diseñados para resistir condiciones climáticas adversas y proporcionar una iluminación brillante y confiable en entornos con poca luz.

  Los tipos más comunes de proyectores industriales incluyen haluro metálico, sodio de alta presión y proyectores LED. Los proyectores de haluro metálico y sodio de alta presión son opciones de iluminación tradicionales, mientras que los proyectores LED son una alternativa más eficiente en términos energéticos.

  Además de su uso en entornos industriales, los proyectores LED también se utilizan comúnmente en eventos y deportes al aire libre. Pueden utilizarse para iluminar grandes áreas como estadios y lugares de conciertos, proporcionando una iluminación brillante y uniforme tanto para espectadores como para artistas.

  En general, los proyectores industriales son un componente crucial en muchas aplicaciones de iluminación exterior. Con su iluminación de alta potencia y durabilidad, proporcionan soluciones de iluminación confiables en una variedad de entornos.

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  Sistemas lineales LED

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  Tubos LED y pantallas estancas

  Los tubos LED cumplen todas las funciones de los tubos fluorescentes tradicionales pero ofrecen un enorme ahorro energético y una durabilidad hasta 5 veces mayor. Gracias a su larga vida útil y a su resistencia, los tubos LED no necesitan mantenimiento y son ideales para su uso en comunidades amplias donde las tareas de mantenimiento se complican, como edificios de vecinos, escuelas, parkings u hospitales. 

  Los tubos LED carecen de mercurio, y por tanto su uso es mucho más seguro que el de los tubos fluorescentes, que pueden provocar problemas si se rompen. Además, se trata de productos extremadamente rentables, ya que, por el ahorro energético y de mantenimiento que ofrecen, su amortización suele conseguirse en un plazo inferior a los 2 años.